El Grupo de Apoyo a la Cultura presentó durante el Mes de la Mujer un espacio dedicado a compartir las experiencias de cuatro vecinas que han contribuido a la comunidad lobense. El salón principal del SPA Aquae Sullis recibió a numerosos asistentes interesados en estas historias de vida.
Elsa Niccia inició el encuentro relatando su trayectoria como enfermera en la Sala de Primeros Auxilios de Antonio Carboni. Su vocación surgió durante la adolescencia mientras cuidaba a su abuela enferma, y se consolidó bajo la guía del Dr. Doblas. Su dedicación se convirtió en un referente para la atención primaria en la zona.
Verónica Meyssán, actual directora del Ballet Folclórico Municipal, compartió cómo descubrió su pasión por la danza desde niña. A los 14 años ya era profesora egresada de la escuela de Mabel Pimentel y Oscar Murillo. Además de su trabajo docente, formó parte de peñas folclóricas y participó en el programa televisivo Acercando Fortines.
Diana Morena contó su evolución desde una entusiasta lectora hasta convertirse en bibliotecaria de la Fundación Lobos. Después de dejar sus estudios de Historia, encontró su camino al responder a un aviso sobre la carrera de Bibliotecología. Hoy, tras un breve período alejada, retomó sus funciones con un renovado compromiso hacia la institución.
Mirta Calandrelli cerró la jornada relatando su cambio profesional: de enseñar Matemáticas a convertirse en diseñadora de moda sustentable con reconocimiento internacional. Sus creaciones han llegado a Punta del Este y Madrid, donde próximamente presentará nuevas colecciones. El encuentro finalizó con una muestra de sus diseños ecológicos.
Esta iniciativa del Grupo de Apoyo a la Cultura resaltó el valioso aporte de estas mujeres a la identidad de Lobos, coincidiendo con las actividades del Mes de la Mujer.